La forja consiste en deformar plásticamente un determinado material de partida (llamado taco) entre dos utillajes (llamados troqueles , matrices o estampas ) sujetos respectivamente a la "mesa" y a la "maza" de la máquina de forja.
Aunque el objetivo primario de la forja sea la obtención de piezas con forma , el trabajo del metal en frío o en caliente constituye un tratamiento termomecánico de alto interés que afecta positivamente a la estructura y por lo tanto, a las características del material de partida . Mediante la operación de forja se consigue un uso mas eficiente de los materiales :
Como resultado, las piezas forjadas ofrecen una alta resistencia y tenacidad al mínimo peso.
La variedad de procesos y la versatilidad de los materiales forjables permiten a la forja por estampación fabricar piezas de unos pocos gramos a cientos de kg, en series de 500 a millones de piezas, con gran variedad de formas y características mecánicas adaptadas a la aplicación correspondiente.
Normalmente poco visibles al ir incorporadas en los conjuntos mecánicos y productos acabados , las piezas forjadas están presentes en prácticamente todos los productos de uso cotidiano : herramientas, automóviles, ascensores, electrodomésticos, artículos de deporte... El proceso de forja da lugar a piezas mas resistentes que las que puedan obtenerse por cualquier otro proceso de los metales y como tal, están presentes siempre que la fiabilidad y la seguridad sean factores críticos.